Como todos sabemos, Blake Lively es la encarnación de
Cenicienta y de cualquier princesa de Disney que se les haya pasado por la
cabeza alguna vez (Perdón si me pierdo, es inevitable). El rol de actriz le
queda bastante chico, muy corto, a una mujer tan hermosa y tan imponente como
ella (Yo les pedí perdón); pero sin ser menos, esta hermosísima mujer sabe cómo
cautivar al público en casi todas las obras en las que pone su firma, y El
Secreto de Adaline no es la excepción.
Recientemente tuve la oportunidad de ver The Age of Adaline
(2015) en Netflix y la verdad es que la he disfrutado bastante. Quiero aclarar
que voy a tratar de ser un poco más liviano con la crítica ya que hay películas que no son excelentes pero que sin embargo se
disfrutan y mucho, y no por ello pierden méritos. En este caso, encontramos
esta especie de ambigüedad en una cinta muy entretenida. Con una premisa
que llama bastante la atención, explora una narrativa un poco fuera de lo
normal en un género que nos tiene tan acostumbrados a lo mismo siempre. Una
protagonista mujer, que no envejece, inmortal. Blake Lively, Ellen Burstyn y
Harrison Ford. Todos los condimentos para que tomes el control y eches a andar
la película un viernes por la noche (exactamente como yo lo hice). Y la verdad
es que si bien las reseñas no son tan favorables con la mayoría de las películas del
género, no se dejen llevar por esto, ya que en mi opinión personal creo que es
una cinta muy amena y que cumple con lo que promete, entretener.
Con un casting de altura, con importantes nombres en su
haber, y principalmente con una protagonista tan carismática e hipnotizante
como Blake Lively (no puedo evitarlo), hacen de esta película una pieza
generalmente interesante y llamativa para el público. Con un personaje que le
sienta más que bien, porque seamos sinceros, comparten demasiado en común… (Y
me refiero a que a esta mujer no le pasan los años!), Lively sabe exponer su cálida
y amorosa personalidad, moldeando el personaje, dándole un toque más natural, más
fresco. Y por más simple que parezca, el carisma no es algo que sea fácil de
lograr, ni siquiera en la vida real. Su buen desarrollo del personaje, por
momentos, tierno y con carisma, por otros trágico y sufrido, le da bastante reconocimiento
a Blake, similar al que creo en Gossip allá por 2007.
Por otro lado tenemos una historia bastante intrigante y llamativa, lo cual es
poco común en el canon y que en definitiva, es una buena idea que se mezcla muy
bien con todos los elementos del género romántico. Si bien tengo que admitir
que hubo varias cosas que no me gustaron de la premisa, principalmente el
narrador omnipresente, y algunos “plot holes” que quedaron muy en la nada,
pienso que se tenía un buen planteamiento entre manos que pudo haber sido mucho mejor
aprovechada, pero que finalmente se dejó llevar por la corriente para caer en
lo usual del género. Aun así y como dije anteriormente, para nada le quita logros a la película, porque no pretende demasiado, porque sencillamente quiere contar
una historia, la historia de Adaline y lo hace de una forma muy bella.
Otro mas de los puntos altísimos del film es la utilización de
paisajes tan pintorescos y fotográficos que sinceramente, provocan placer al observar
la cinta. Y esto hace que podamos disfrutarla aún más, generando ambientes tan poéticos
y bellos a la vista que logran desviar la atención de las pequeñas faltas que
la cinta podría llegar a tener, y todos sabemos que no hay nada que combine
mejor que el paisaje con el romance.
Podemos agregar también la excelente química entre los
protagonistas, más que nada entre Lively y Ford, una pareja que a priori puede
parecer extraña, pero que encaja sorprendentemente bien en pantalla, denotando
paralelamente los dotes actorales de nuestra protagonista, quien en ningún momento
pierde escena al colocarse junto a una bestia de Hollywood como el señor Han
Solo (por si hay algún fan de Star Wars por ahí).
Una linda película, que no es más de lo que muestra en la premisa,
pero que aun así se hace interesante a medida que avanza, logrando atraer al
espectador a través de sus paisajes y sus protagonistas, a través de una
historia intrigante. Simplemente, un buen film, que no pretende demasiado
pero que logra cautivar al público con unos buenos giros y excelentes
presentaciones de personajes. De mas esta decir que la podemos catalogar como
ESA película que te salva la noche de viernes, que sabes que no te va cansar y
que sabes que a pesar de ser bastante predecible, la vas a mirar hasta el
final, porque te gusta y, porque te entretiene. Así que, si, definitivamente
cumple con su función y por eso es que The Age of Adaline, es una buena película.
6/10
Muy de acuerdo, bella pelicula! y si, es de las que te salvan un Viernes a la noche... aun mas, a aquellos que se vieron de todo y se les agotaron ''los recursos''. Muy Recomendable.
ResponderBorrarpersonas como nosotros basicamente jajajajajaja gracias!!
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